Torneo Socios.com LPF – Fecha 11 – Sábado 09/10/2021 – Banfield (0) vs. River (1) –
Si antes del torneo nos decían que íbamos a jugar como local contra Boca y River, y no solo eso sino que íbamos a recibir a la Reserva de Boca y a River sin 10 jugadores por lesiones y partidos de selecciones. Firmábamos, es más nos ilusionábamos contra triunfos contra los grandes. Bueno no solo que no ocurrió eso sino que Banfield no metió goles en ninguno de los dos partidos y generó muy pocas situaciones de gol en ambos encuentros. Mejoró en actitud y postura colectiva, eso sí. La imagen contra Boca fue muy pobre y el segundo tiempo de ayer contra River fue digno. Llevó al partido a jugarse a campo rival, no más que eso. No hizo revolcar a Bologna que casi ni atajó. River ganó bien y hasta de contra con el desequilibrio de Carrascal pudo haber metido el 2-0.
Pero vayamos al primer tiempo. River arrancó con una presión asfixiante en el mediocampo. Gallardo juntó volantes que tienden a cerrarse, menos Simón por derecha. Entonces Zuculini, Enzo Fernández y Palavecino la recuperaban rápido ante cualquier avance de Banfield por el medio. Rollheiser se tiraba atrás y también recibía con libertad. Pero lo más peligroso de River era Palavecino, más tirado a la izquierda que en el Superclásico que jugó suelto. De un remate suyo vino el rebote largo de Altamirano que le quedó a Girotti, gambeta con pisada, remate débil y gol en contra de Gustavo Canto, que luego salió lesionado. Con poco River se puso en ventaja, el resto del contenido del gol lo terminó de llenar Banfield con sus errores.
Luego del tanto siguió la misma tendencia, Banfield defendiendo y River bien plantado en mitad de cancha imponiéndose desde un ritmo físico admirable. A falta de desequilibrio por las bajas, el equipo de Gallardo jugó con la intensidad con la que entrenan, según palabras de sus propios jugadores. Solo al final del primer tiempo Nicolás Domingo por corazón llevó al equipo un poco más adelante y Banfield ganó metros. La primera mitad el equipo solo tuvo como destacable los aportes de Juan Manuel Cruz que tuvo buenas intervenciones alejándose del área.
Al revés de lo pensado fijando a los centrales jugó Ramiro Enrique que perdió siempre con el 28 de River Felipe Peña. Ante la lesión pre partido de Jesús Datolo, Sanguinetti optó por hacer el mismo cambio que había realizado contra Colón cuando Enrique reemplazó al 10. Solo que al ser de características diferentes también el equipo cambió el esquema y así no hubo nadie que una al mediocampo con el ataque. Entre el volante más adelantado (Galoppo) y el delantero más cerca de Bologna (Enrique) había una distancia grande, campo encima bien aprovechado por River porque era la zona donde juntaba más jugadores.
Igual que la última vez que había jugado de titular contra Patronato, Enrique salió reemplazado en el entretiempo. En su lugar entró el colombiano Mauricio Cuero y Juan Álvarez pasó a ser mediapunta como en el último partido con River cuando metió el gol del triunfo. El colombiano entró rápido y con confianza, generó con sus ganas y velocidad algunos avances. Tiró malos centros pero con poco le agregó algo al equipo una postura más ofensiva. Con el correr de los minutos Fabrizio Angileri lo tomó bien y ya no lo dejó lanzarse en velocidad. Por el medio de la defensa de River Felipe Peña seguía sacando toda pelota que le pasaba cerca y la que le pasaba lejos también. Jugó por él y por Pinola que debía cuidarse porque tenía una amarilla del primer tiempo.
Banfield el segundo tiempo arrinconó a River por empuje y determinación. Franco Quinteros completó un gran partido como lateral izquierdo y no mucho más para destacar. River remató 18 veces en el partido y Banfield 9. Por los números pareciera que el Millonario fue ampliamente superior. No fue así. La diferencia entre ambos equipos, y por algo uno está primero y otro en el puesto 23, está en cómo traducen la tenencia y los avances en situaciones de gol. River de tres cuartos en adelante llega y termina la jugada, bien o mal, pero la termina transformando en algo. Banfield en tres cuartos se queda sin ideas. El primer tiempo por falta de gente, el segundo por falta de claridad en el último toque.
La campaña es mala, muy mala. El equipo fue mejorando en actitud pero no en juego, hay una involución en ese aspecto del partido contra el escolta Talleres donde Banfield generó montones de situaciones de gol, al encuentro de ayer con River. Sin Datolo nadie se hace cargo de la conducción, Galoppo juega lejos de los delanteros y no influye en ataque.
Como visitante venimos de tres 0-0 contra Racing, Defensa y Justicia y Colón. Ahora se viene el clásico con Lanús. Nadie va a jugar un clásico con la ilusión de empatarlo por más mal que se llegue. Después del partido Jesús Datolo declaró que seguramente va a estar el sábado, que es el partido que le gusta jugar, el que juega desde los 9 años. En esa ilusión del 10 de 37 años está la ilusión del público de Banfield que ayer volvió a la cancha a ver algo que no vio. Ojalá podamos festejar y disfrutar el sábado que viene de frente al televisor. Se está haciendo largo este torneo largo, con un alegrón quizás se nos haga más llevadera la cosa de acá al final.