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Los goles que no se convierten en un arco…

Torneo Socios.com LPF – Fecha  5 – Sábado 07/08/2021 – Banfied (0) vs. Talleres (1) –

Es difícil explicarle a alguien que solo vio el segundo tiempo del partido con Talleres que el primer tiempo fue de las mejores producciones colectivas de Banfield después del subcampeonato en la Copa Maradona. En el complemento la imagen fue completamente otra. La derrota del sábado se explica primero desde la ineficacia para definir y segundo desde la falta de respuestas tras el gol de Ángelo Martino.

Primero lo primero. El arranque de Banfield fue demoledor. Superó y desdibujó a un buen rival. Lo movió y le encontró espacios por todos lados. Lo atacó con secuencia de pases que arrancaban en Lautaro Ríos con esos pases hacia adelante rápidos en modo Corcho Rodríguez. También lo atacó con envíos largos de los centrales hacia Pons que encontraba huecos entre la zaga de Talleres Tenaglia-Rafal Pérez.

Banfield generó las situaciones para ponerse en ventaja pero no concretó. Directamente le acertó poco al arco defendido por Guido Herrera. La única que no se fue afuera pegó en el palo después de un cabezazo de Pons. Ramiro Enrique volvió a mostrar buenos minutos con un cada vez más amplio abanico de recursos para resolver. Casi mete un gol de chilena y aportó desequilibrio por la izquierda. Como contra San Lorenzo jugó más de extremo que de segunda punta lo que le demandaba un sacrificio físico para volver hacia atrás con el lateral derecho rival Julián Malatini.

El primer tiempo el partido del mediocampo de Banfield fue casi perfecto. Lautaro Ríos jugó asentado con la confianza de ya 4 partidos en primera. Giuliano Galoppo en su nueva faceta más participativa en el juego y Joel Soñora se alejaba de la izquierda para acercarse a jugar por derecha donde Banfield junta gente para atacar con el tándem Coronel-Álvarez. Todos movimientos bien hechos que necesitaban ser trasladados al resultado con un gol para que el desgaste no sea en vano.

El segundo tiempo los primeros minutos arrancó igual. Pero de repente Talleres generó una contra de la nada con Banfield retrocediendo mal que no terminó en gol solo porque Ángelo Martino remató al arco cuando tenía 3 compañeros para recibir el pase. A los pocos minutos el mismo jugador volvió a avisar. Todavía eran situaciones desprendidas del contexto del partido pero Talleres empezaba a encontrar huecos en la defensa de Banfield.

Hasta que llegó el gol. Gustavo Canto lo había marcado bien el primer tiempo al peligroso colombiano Diego Valoyes. Vino un pelotazo largo y en primera instancia ganó Canto pero la pelota salió rebotando con un pique alto hacia adentro que el defensor de Banfield no llegó a controlar. De ahí nació el arranque explosivo de Valoyes que puso un pase perfecto a la espalda de Maldonado, donde no estaba Coronel, para la llegada de Martino que metió el 1 a 0.

Lo que vino después fue otro partido. Con confianza Valoyes salió de la laguna del primer tiempo y volvió a ser ese delantero imparable que sufrimos en el partido de la Copa Maradona en Córdoba. Creció Auzqui agarrando la pelota como mediapunta. Michael Santos de 9 se generó con sus movimientos sus chances de gol para ampliar el resultado. Solo Facundo Altamirano mantuvo en partido a Banfield. El mediocampo no contenía y le costaba mucho recuperar la pelota. Salieron Soñora y Canto lesionados e ingresaron Datolo y el debutante Juan Rodríguez (el hijo de Clemente).

Los cambios no surtieron el efecto deseado aunque también hay que decir que entraron en un contexto de partido con el rival con mucha más confianza y mejor plantado en la cancha. Los extremos de Banfield Álvarez y Enrique sintieron el desgaste del primer tiempo y les costaba más el recorrido largo. Banfield solo se acercó al empate por un gran pase de Galoppo a Juan Manuel Cruz y por un cabezazo del mismo Giuliano que sacó con una gran estirada el arquero Herrera.

La defensa de Banfield pasó de un gran primer tiempo a una pálida actuación en la segunda parte que se completó con la expulsión de Alexis Maldonado por doble amarilla después de una patada lejos del área a Valoyes de espalda. El equipo no tuvo respuestas después del gol de Talleres. Estar en desventaja sin merecerlo fue algo que había experimentado poco contra San Lorenzo donde consiguió el empate rápidamente.

Cuando Banfield fue superior a Talleres no concretó. Cuando Talleres insinuó metió un gol y recién después del tanto justificó la superioridad. El fútbol se gana con goles. La falta de efectividad es la primera tarea para el hogar. Los rivales también juegan, ajustan y mejoran durante los partidos. Sobreponerse durante el partido a un resultado adverso era una especialidad de la casa del Banfield de Sanguinetti. Esta vez no pudo cocinar su receta. Esto recién arranca. El buen funcionamiento del primer tiempo es algo de donde agarrarse. El equipo salió del pozo de rendimiento mostrado contra la Reserva de Boca. Si hace dos semanas nos decían que íbamos a superar ampliamente por 45 minutos a Unión, San Lorenzo y Talleres de Córdoba era impensado. Estamos jugando mejor de lo que creíamos después del flojo arranque. Hay que trasladar eso a goles y puntos. Algo tan simple y tan difícil a la vez. 

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